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Si te estás planteando abrir un túnel de lavado, elegir una buena localización es esencial. Incluso la mejor instalación, la más actualizada y atractiva para el cliente no verá beneficios si está escondida. Un túnel de lavado tiene que poder encontrarse rápida y fácilmente, pero estas dos características no son las únicas que hacen que una localización sea considerada buena.
Dondequiera que haya coches encontrarás clientes potenciales. Esto significa que localizar tu túnel de lavado en una calle principal es una idea genial. Además, sería ideal que los vehículos que se acerquen al sitio se vean obligados a reducir la velocidad, ya sea debido a una señal de stop o a un semáforo. Colocar banderas, señales grandes o incluso pintar con espray los muros que dan a la carretera te ayudará a atraer clientes.
Los cruces o las carreteras secundarias no son ubicaciones adecuadas si dependes del tráfico. Incluso si colocas señales visibles y direcciones cortas y fáciles de entender en la carretera principal, solo unas pocas personas que estén recorriendo el camino entre los puntos A y B podrán encontrarte.
En definitiva, poder ver el túnel desde lejos y tener la posibilidad de alcanzarlo directamente o no marcará la diferencia.
En las horas punta, los coches pueden acumularse en el sitio. Asegurar que los choches fluyen sin problema creando accesos anchos hacia y desde las instalaciones. Además, los accesos a las carreteras deberían, si es posible, ser accesibles directamente desde la carretera principal. Tener que apagar una o dos veces antes de alcanzar el túnel de lavado tiende a confundir a los motoristas menos decididos, por lo que `pueden optar por posponer el lavado para otro momento.
Si eres el propietario de una estación de servicio o de un taller mecánico, puedes expandir tu negocio con un túnel de lavado. Cualquier persona que esté en la carretera y se disponga a llevar a su coche a alguna de estas dos instalaciones, es más probable que esté predispuesta a darle también un lavado. Así, realizar ambas visitas puede convertirse fácilmente en un ritual para la gente del área, especialmente cuando realicen salidas los fines de semana.
Si no eres dueño de una estación de servicio ni de un taller, al menos asegúrate de que tu túnel de lavado se encuentra cerca de alguno de estos negocios. De esta forma, podrás firmar acuerdos con ellos que beneficien a ambas partes. Por ejemplo, puedes hacer que los clientes de la gasolinera de al lado obtengan un descuento en tu túnel de lavado si entregan un recibo que pruebe que previamente han llenado el tanque.
También puedes hacer un buen negocio en áreas industriales u otras partes de la ciudad que cuente con la presencia de empresas grandes. Ubicar un túnel de lavado para vehículos grandes como camiones o autobuses cerca de compañías de transporte da sus frutos. De nuevo, puedes retener a tus clientes ofreciendo descuentos a los directores de estas empresas. Los mismo ocurre con las compañías que tienen una flota de coches para sus empleados.
Muchas ciudades tienen centros comerciales o plazas que agrupan diferentes empresas y proveedores de servicios variados. Colocar un túnel de lavado en esas áreas también puede merecerte la pena, ya que las familias suelen repartirse las tareas y mientras que unos están comprando o haciendo recados, otros pueden hacerse cargo de lavar el coche.